Esta mañana -en que aún no asimilo del todo que dejé pasar el tiempo al punto que no solo una amiga querida partió y no me di cuenta sino que además pasaron 938 días sin que me percatará- me llegan estas palabras:
Y salí de inmediato a mi ventana, pues desde aquí donde escribo casi todo el día escuchó los colibrí que habitan en los árboles de la calle, sin embargo, en mi afán de aprender a distinguir su canto, suelo no salir a mirarles, y hoy, hoy tengo deseo de grabar en mi memoria su figura, su gracia al detenerse de su característico y rapidísimo vuelo que tanto admiro cuando van en reversa.
VAMOS, VAMOS A DES-EMPOLVAR EL TENER PRESENTE QUE DONDE ESTÁ NUESTRO TIEMPO ESTÁ NUESTRO CORAZÓN, PUES POR OLVIDAR ESTE DETALLE NO POCAS VECES NO LE HACEMOS HONOR AL CARIÑO QUE LE TENEMOS A OTROS SERES VIVOS
VAMOS VAMOS A DES-EMPOLVAR EL ESCRIBIR CARTAS
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¡gracias por su comentario! pronto lo estaré publicando. este paso previo es solamente para evitar que en este blog se publiquen groserías innecesarias, podemos no coincidir, sin embargo, evito el insulto como recurso.