lunes, 30 de noviembre de 2015

martes, 24 de noviembre de 2015

Reina y señora en “tierra de machos“


 
Imagen tomada de internet
María Victoria Rivera Bustamante, Abuelita Maracuyá, madre, mujer soñadora, entusiasta, para quien el frío y la altura (4.380m.s.n.m) de “tierra de machos“ no son excusa para que no se ponga sus zapatillas cada mañana y salga a devorar unos cuantos kilómetros antes de salir a trabajar, en una tierra que parece estar más cerca del cielo y donde perfectamente la temperatura al amanecer es de -4C.

El pasado 22 de noviembre, dejo su puesto de venta de pulpa de maracuyá, se puso su ropa deportiva y con el número 317 a un paso lento pero seguro completó exitosamente 42k de la maratón de Pasco, en el centro de Perú.

Foto tomada de internet para resaltar el ejemplo de María Victoria Rivera Bustamante
  
La exigencia de gran resistencia física que acompaña a una maratón se ve potenciada en una tierra inclemente, pero el pasado domingo la vitalidad de esta mujer de 102 años, le ganó al clima, la altura, la exigencia de la maratón y lo miope de nuestras expectativas colectivas respecto a las personas de la tercera edad.

Les estoy dejando los link de un par de videos para los que quieran ver su día a día, con una dieta lejos de la carne roja, el pollo, los doctores y las pastillas y más cercana a las verduras, mazamorra de maca con quinua, los huevos sancochados, un buen baño de agua fría antes de entrenar, trabajo diario y una vida frugal.

 

Sin temor a equivocarme María Victoria Rivera Bustamante es emblema del espíritu de este blog, más allá de las preferencias de vida de quien lee/escribe, ella es tesón y fuerza, sencillez y sabiduría que viven en una mujer valiente y segura de si misma que se agranda frente a la adversidad; 

porque María Victoria Rivera Bustamante es: maratonista.

Y usted y yo ¿qué excusas ponemos para no salir a des-empolvarnos, para no ir y correr una maratón?


VAMOS, VAMOS A DES-EMPOLVARNOS HASTA EL ULTIMO ALIENTO

 

lunes, 23 de noviembre de 2015

En modo NO

Ahí estaba yo en el amanecer del 22 de noviembre en modo NO, salí con los primeros rayos del sol a darle de comer a Shirley Yahaira (la tortuga) y cuando ya regresaba adentro de la casa, la vi, estaba ahí sola en el aire bañada de sol, simplemente siendo.  Y fue cuando me dije: qué relajo y yo hoy solo estoy en modo no; ni siquiera les puedo decir que tenía una excusa válida para no ir a la carrera, simplemente estaba en modo NO.  Pasaron un par de horas y viendo la foto que le tomé reaccioné me cambié de ropa, me puse el reloj (faltaban 10 minutos para que iniciara la competencia) y mi Angel de la Guarda se encargó de que no hubiera un solo vehículo en el camino, ni un solo semáforo que no estuviese en verde y lo más importante, que yo tomara la ruta indica (hay 3 opciones para llegar desde donde estaba). Sinceramente me deje guiar de tal manera que cuando me ví estaba justo en la meta de salida y un señor indicándome que había un espacio vacío frente a mi. Je je como es la vida ¿verdad?, tomé un sorbo de agua, una mordida pequeña a una barrita de granola que llevaba, me bajé, fui en dirección a la meta y un minuto después salia el Señor Laurens Molina, que siempre, siempre me emociona, ahí estaba yo al lado de él sintiendo que ya había valido la pena decidirme a desterrar el NO que me invadía.  Pero a los 100 metros de la salida lo encontré de nuevo y me volvió a inundar, me faltaba el aire y estaba completamente consciente que no solo hacían falta 7.9k más, sino unos columpios de padre y señor mío que el año pasado me dieron batalla y ese día yo estaba empoderada, en cambio ahora con esta actitud debería dar la vuelta en la esquina, regresar e irme tranquila, total ¿quién se daría cuenta? ¿¡¡!!!!????? Solo que esta carrera inicia y termina cuesta arriba, y ustedes saben que yo tengo esa espinita en el alma, que se pone en carne viva cuando voy cuesta arriba, si esa misma: Chagüites que me venció en los últimos 500mts el 28 de junio de 2014, y de pronto me olvidé del modo en que andaba y todos mis recursos los enfoque en subir esa cuestita para salir a la calle que lleva a Rincón Grande de Pavas, ya en esa dirección recuperando aire, mi Angel de la Guarda –que conoce mi corazón, mi voluntad- no se jugó el chance y me puso a cada lado a Deportistas con Propósito que sin saberlo NO ME DEJARON DESISTIR, no porque yo no pudiera, ya sabemos que una mula se queda corta a la par de mi resistencia (siempre que me den tiempo je je), sino por mi estado de ánimo.  Y vendrían más adelante los puntos y las comas para que esta des-empolvada se concentrara de nuevo, no en cumplir, no en dejarse acompañar, sino en poner su corazón en cada paso, en estar alerta de las señales en el entorno, de buscar en cualquier camino la luz que dice que aquí estamos todas, aunque a veces nos hagamos de la vista gorda.  Una muchacha de la asistencia, nos sonrió honesta y visiblemente agradecida, sinceramente toda ella estaba en modo agradecimiento y con voz alta nos dijo: gracias, gracias por venir a sacarnos de la calle.  Yo que estaba ahí por terquedad de mi Angel de la Guarda, estaba incluida en un agradecimiento que hasta ese momento no me estaba ganando, no lo estaba interiorizando.  A esa altura ya estábamos en el centro del pueblo, hay más gente que apoya, son lindísimas, no hay manera de claudicar con ellas apoyando de palabra y con manguera.  Me encanta, me encanta, en el punto de retorno llevábamos un buen paso, pero le advertí a mis acompañantes que en la subida mi rendimiento se va a menos de la mitad, así que decidimos disfrutar de la gente.  Y me fui para adentro, con la paz que me da siempre conectarme con el mundo, ser una con él.  Subí mi vista a un segundo piso y ahí estaban detrás de las rejas una pequeñita con su mamá, agitando las manos por entre los barrotes, la mamá se decidió a decirme VAMOS, VAMOS con tal fortaleza interna (no se confunda con decibeles), que la pequeña –que no debe decir aún muchas palabras- balbuceó un VAMOS, VAMOS, que creo solo nosotras 3 entendimos.  Una vez más des-empolvarme me acerca a aquello en lo que creo profundamente: el ejemplo nos arrastra y, debemos en cada actuar ser conscientes de que alguien nos mira, no lo digo para escondernos, sino para buscar sembrar semillas no que motiven sino que inspiren a otras personas a crear un mundo lo más parecido a aquel con el que soñamos.  La muchacha de la asistencia que les comenté hace un rato me sacó de mi trance, pues había  pasado su puesto de asistencia al otro lado de la calle y nos motivaba por cuanto ya teníamos más de la mitad de la carrera y por supuesto de nuevo agradecía y agradecía.  No les cuento la subida porque solo recordarla me cansa, ja ja ja.  Pero a unos 200 mts de la meta, un buen grupo de las Deportistas con Propósito se vino en sentido contrario, era una marea verde que venía hacia mi, una preguntó ¿cómo se llama? mi apoyo le dijo: Rebeca y ahí se armó el relajo, chiquitibumalabinbombá rebeca, rebeca….. otra vez, otra vez.  chiquitibumalabinbombá rebeca, rebeca….. Y se me vino todo de golpe, los aplausos apagaron la súplica de mis piernas para parar, el vamos, vamos de la mamá y su hijita, la muchacha agradecida, las personas que donaron acompañarme aún cuando sabemos que yo voy muy, muy despacio, los motorizados de Jesús que no se cómo logran que sus motocicletas no se recalienten a mi paso, las personas de corta y mediana edad con la que choqué los cinco …… todo todo se concentró en mis piernas, y NO LO VAN A CREER, en cuesta arriba esta des-empolvada despegó las piernas del piso y aceleró para cruzar la meta como si estuviera peleando por el primer lugar, no solo por mi actitud sino por todas las corredoras que aún estaban por ahí y me vitoreaban.  NO HAY PALABRAS PARA LA GRANDEZA CON QUE ME CONTAGIAN LAS DEMAS EN LOS MOMENTOS EN QUE ESTOY CAIDA.  Hicieron que mi carrera nuevamente fuera inolvidable.

 
bañanda de sol, al amanecer del 22 de noviembre, sólo siendo.

en una ventana del segundo piso hay 2 VAMOS, VAMOS que ahora viven en mi

Pero igual me quede con esa pregunta: ¿dónde y a quién le contagiamos nuestra visión de mundo?, ¿cuántas opciones en un día en un mes tenemos para inspirar a otras personas a darlo todo, a mover la sensibilidad que es la palanca de la voluntad del servicio a los demás?  Y no hay duda que si somos coherentes entre lo que pensamos y hacemos la respuesta será: 24 horas al día.  Y yo agrego, siempre que le sea posible considere la posibilidad de hacer aquello que le apasione frente a seres humanos que por la forma en que vivimos están fuera de contagiarse no de su profesión, habilidad o destreza, sino de su pasión sea cual fuere.  Si estamos alerta encontraremos un par de veces al año esa posibilidad.  Le debemos esa oportunidad al mundo con el que soñamos.

 
Deportistas con Propósito que el 22 de noviembre donaron el último lugar

Fue una buena carrera y se que quedan detalles por fuera, pero la ventaja es que el blog nos permite volver a escribir en otro momento. Siempre pedirles que sean benevolentes con cualquier error pues escribo sin revisar, justo como cuando escribo una carta.

je je así cualquier llega a la meta

VAMOS, VAMOS A DES-EMPOLVARNOS CONTAGIANDO NUESTRA PASION

PD. esta carrera es CORRE POR LOS DE LA CALLE de la Fundación Promundo, misma que da atención primaria a personas en riesgo social y habitantes de la calle en su mayoría con enfermedad adictiva.

por supuesto que me puede presionar cada mañana

este blog es una locura conjunta que tiene vida propia desde el 10 de diciembre del 2013, casi todo todo lo que hemos hecho es por sugerenci...